jueves, 11 de junio de 2009

No los envidio

Les leo, les escucho, y les veo tan ilusionados... y no los envidio. No lo hago porque no existe tal cosa llamada 'envidia de la buena'. Me ilusiono con ustedes, igual que ustedes, y añoro como ustedes. "Algún día", me digo, así como ustedes lo hacen; y me dedico un "quiero seguir creyendo" cuando mi fe en la humanidad decae.

No los envidio porque todos ustedes son quienes me susurran al oído esas palabras tan llenas de sabiduría y esperanzadoras, que me hacen creer y querer volver con nuevos bríos, que me incitan a escribir nuevas historias que hace mucho no plasmo en las páginas de mi vida, y me dan esas cosas que me hacen el día.

¿Cómo podría envidiarles?

Al contrario, se los agradezco...

2 comentarios:

Mary Carmen Huacuja dijo...

Chacha:
Mientras buscaba algo de cuentos de misterio y de terror en la red me topé súbitamente contigo (¿qué querrá decir eso?); inadvertidamente me encontré sumergida en tus chaquetas y quedé fascinada porque se parecen tanto a las mías (de paso, dejé de trabajar como dos horas y, por supuesto, ya te culpo).
Es un verdadero placer haberte encontrado. No tengo blog, en realidad no sé si algún día lo tendré; por lo pronto, sigo el tuyo a partir de hoy.
Gracias

Chacha dijo...

Al contrario, gracias a ti por leerme y bienvenida a estos terruños.

¿Buscando cuentos de terror te encontraste con el blog?... ¡Dios! Google debe estar loco, o el loco soy yo.

Saludos y nuevamente gracias.